¿Qué son y cómo funcionan los Servicios de Asistencia Técnica (SAT)?

Como su propio nombre indica, se tratan de servicios orientados a la reparación, instalación y mantenimiento y/o conservación de aparatos de uso doméstico.

El servicio de atención técnica puede ser presentado tanto en el domicilio del cliente o en el local donde la empresa que presta el servicio desarrolla su actividad.

Para ofrecer un Servicio de Asistencia Técnica, tanto técnicos como empresas han de cumplir unos requisitos reglamentarios mínimos establecidos, y en el caso de los SAT oficiales, han de poseer además una autorización escrita del fabricante, o en su defecto de su representante legal en nuestro país.

Por lo tanto, los SAT van a proporcionar la confianza y la seguridad al usuario, de que va a recibir una atención personalizada y de calidad a la hora de resolver su avería o sus dudas.

Presupuestos

Lo primero que debemos hacer al acudir a un servicio técnico, da igual cual sea la línea (marrón, blanca o pequeño electrodoméstico, calefacción…) es solicitar un presupuesto por escrito, previo a la realización del servicio. Si quieres renunciar a un presupuesto has de hacerlo por escrito.

El presupuesto podrá ser considerado como un contrato, en el deben estar bien identificadas ambas partes, el aparato o aparatos implicados en el presupuesto, detalle de actuaciones (reparación, diagnostico…), plazo de validez del presupuesto, pagos a satisfacer haciendo referencia a las piezas de repuesto a utilizar.

¿Pueden cobrarnos la elaboración del presupuesto si lo rechazamos?

Por lógica, para presupuestar han de hacer un diagnóstico de cuál es la avería, para cualquier técnico esto supone dedicar un tiempo valioso. El precio de un presupuesto no debería sobrepasar el equivalente a 15 minutos del valor de una hora de trabajo en el caso de electrodomésticos pequeños, media hora en el caso de la línea blanca, y una hora de trabajo en la línea marrón.

Un SAT nos ha de instalar siempre piezas de repuesto nuevas, y sólo podrán ser instaladas piezas de repuesto usadas (pero no defectuosas) en caso de que el cliente de autorización por escrito.

El servicio de atención técnica ha de entregarnos al final una factura. En ella ha de figurar como mínimo los mismos datos que en el presupuesto, incluyendo además el IVA, la fecha y la firma del responsable del SAT, y el importe ha de corresponderse con el del presupuesto.

Gracias a la factura, tendremos un comprobante de la reparación realizada, que nos proporciona una garantía mínima de 3 meses desde la fecha de entrega del aparato. Esta garantía sólo afecta a las partes reparadas, por ejemplo al recambio empleado, y no ha de confundirse con la garantía del aparato.

¿Cómo saber si el SAT es de confianza?

Lo barato puede salirte caro, por ello conviene recurrir a técnicos cualificados y de confianza, y no por ello han de ser oficiales de la marca, pero sí deben que cumplan las normativas vigentes.

• Establecimiento: Un SAT debería disponer de un establecimiento al que poder acudir para llevar el aparato o realizar una reclamación, el que lleve años establecido, nos dará más confianza. Si además está inscrito en algún tipo de colectivo de técnicos a nivel provincial, autonómico o nacional, nos proporcionará aún más confianza, lo mismo que si pertenece a una cadena o franquicia de SAT.

• Referencias: El boca a boca es el principal medio de publicidad, incluso con el boom de Internet, por eso conocer las experiencias de otros usuarios con cierto SAT, nos ayudará a cerciorarnos de su fiabilidad.

• Presupuesto: Un técnico de un SAT que acuda a nuestro domicilio no nos va a cobrar por realizar el presupuesto, a no ser que lo rechacemos. Si nos van a cobrar por el desplazamiento deberían indicárnoslo previamente por teléfono. Si aceptamos el presupuesto no nos lo deberían cobrar. Se han dado casos de estafa, en los que un supuesto técnico (típico caso de anuncio de semáforo) acude a hacer un presupuesto, lo cobra, y no se vuelve a saber de él. Por lo que es altamente recomendable evitar los técnicos que se anuncian en farolas, semáforos y tablones de anuncio.

Busca un servicio técnico de confianza, será rápido, eficiente y te ofrecerán las máximas garantías y, en caso de reclamación, sabrás donde encontrarlos.