La toma a tierra es un elemento esencial en cualquier instalación eléctrica, pero su existencia pasa desapercibida para la mayoría de los usuarios o desconocen su función.
Toda instalación eléctrica ha de tener una puesta a tierra, que actúe como protección a fin de evitar el paso de corriente a las personas, protegiéndolas ante algún posible desperfecto en el circuito eléctrico.
¿Por qué es necesaria una puesta a tierra?
Como hemos dicho antes, la puesta a tierra protege a las personas de derivaciones o fugas en el circuito eléctrico, que pasarían a través del cuerpo buscando un camino hacia el suelo.
Supongamos por ejemplo un cable deteriorado dentro de una lavadora, que hace contacto con la estructura metálica, una persona al tocar la estructura de la lavadora, recibiría una descarga electica que atravesaría su cuerpo hasta llegar al suelo.
Para prevenir esto está la puesta a tierra. En el caso del ejemplo anterior, la estructura de la lavadora estaría conectada a través del enchufe directamente a una pica de cobre, de aproximadamente 2 metros, clavada en el suelo próxima al hogar. De este modo, cuando se produce la fuga eléctrica o derivación, la corriente que tiende a escoger el camino más sencillo, se transfiere a tierra a través de este circuito adicional en lugar de a través de las personas.
Para aumentar la seguridad de la toma a tierra, su instalación ha de pasar también por el cuadro de protecciones eléctricas, de manera que cuando se produzca tal derivación ‘salte’ y no produzca daños en la instalación además de a las personas.
Cuando esto suceda, bastará con desconectar el aparato y restablecer el suministro eléctrico, pudiendo llamar a su servicio técnico de confianza para la reparación del aparato, indicándoles que este tiene una derivación a tierra.
Por lo tanto, debido a la doble protección que proporciona, la puesta a tierra de una instalación eléctrica, siempre será de lo más recomendable. Pero siempre ha de realizarla un técnico especializado, ya que por ejemplo dependiendo del tipo de suelo o de instalación, la pica clavada en el suelo, puede necesitar aditivos que faciliten la conductividad, o tener una forma y tamaño distinto.
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