Las cinco averías más comunes de tu lavavajillas

El lavavajillas se caracteriza por ser un aparato que por el grado de sencillez de sus mecanismos, no requiere de intensas labores de mantenimiento y servicio técnico para extender su ciclo de vida útil. Sin embargo, esto no significa que el electrodoméstico no pueda presentar posibles problemas o averías a medida que el tiempo transcurre.

Por ello, compartiremos las cinco averías más comunes que solemos encontrar en los lavavajillas, así como las revisiones pertinentes que debemos hacer para detectar la raíz del problema. ¡Toma nota!

1.     No desagua

Cuando estos aparatos no desaguan el problema podría estar siendo causado por distintas razones, por ejemplo: es posible que haya un atasco en las tuberías de la casa o la manguera, la bomba de desagüe puede estar obstruida o que la manguera esté doblada.

Incluso existe la posibilidad de que el aparato esté presentando defectos de corriente en el módulo electrónico.

2.     No seca

En aquellos casos en los que nuestras vajillas no salen totalmente secas, quizá se deba a que el electrodoméstico no posee suficiente abrillantador, el termostato esté estropeado o que la resistencia del aparato se haya quemado o esté averiada. ¡Hay que revisar!

3.     No coge Agua

Los principales motivos que pueden estar ocasionando este problema radican en una posible rotura de la válvula de entrada, que la corriente no llegue o que la manguera de entrada del agua esté doblada, sucia u obstruida.

Nuestro servicio técnico también recomienda revisar cada uno de los canales de paso de agua a fin de verificar que se encuentre fluyendo normalmente.

4.     No disuelve la pastilla del detergente

Que el lavavajillas no disuelva la pastilla del detergente puede ser un indicio de la existencia de algún componente que está impidiendo que el agua del aspa haga contacto con la pastilla. ¿Qué hacer en estos casos? Podemos probar con cambiar la forma de colocar los elementos dentro del electrodoméstico. 

Pero… ¡esto no es todo!, también es probable que el aspa posea los orificios obstruidos, que el cajetín no abra con facilidad o que la pastilla se haya quedado adherida en él.

5.     El consumo de sal es desaforado

Este tipo de averías podría ser generado por un dosificador dañado, por lo que en estas circunstancias tendremos que cambiar el ablandador del agua.

También existe la posibilidad de que la electroválvula de regeneración esté en un pésimo estado, la placa electrónica no esté funcionando bien o el tapón del depósito no esté cerrando herméticamente.

 

 

Trucos para evitar que el lavavajillas se deteriore:

·       Limpiemos periódicamente el filtro y el brazo de aspersión, debido a que los restos de alimentos pueden llegar a obstruirlos y averiar el lavavajillas.

 

·       Escojamos el programa de lavado de manera inteligente, pues la solidez del agua y la cal no es la misma en todas las provincias, así que debemos ajustar el funcionamiento de nuestro lavavajillas y optimizar los recursos que nos proporciona. 

 

·        Usemos la cantidad de sal apropiada, por este motivo, aconsejamos echarle un vistazo a las indicaciones del fabricante.

Al seguir estas recomendaciones podremos evitar algunos problemas con nuestro lavavajillas. Pero, en caso de presentar las averías que se mocionaron anteriormente o de otro tipo, lo mejor es acudir a las manos expertas de  nuestra empresa de servicio técnico: SAT en la provincia de Pontevedra. ¡Pruébanos!

 

 

Share

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *